一阿Q正傳 Ā Q Zhèngzhuàn

Lu Xun, 1922

¿De qué va?

El libro relata las aventuras y desventuras de Ah Q, de quien no sabemos ni su nombre completo, ni dónde nació ni cuándo, pero que se trata de un campesino de escasa educación que se autoengaña tratando sus humillaciones y derrotas en las peleas como victorias y éxitos. A lo largo del libro podremos encontrar varias situaciones donde trata de humillar a quien cree inferior pero al mismo tiempo teme a quien es más poderoso que él.

Por qué leerlo

Lu Xun es todo un referente de la literatura china, siendo el máximo exponente de la del S. XX. Este libro es todo un clásico en China y puede funcionar como una aproximación a la sociedad post-revolucionaria (después de la revolución de 1911 que hizo caer al último emperador) y pre-comunista.

La historia de Ah Q es una obra que cambió la literatura china para siempre. Con su mezcla de sátira, ironía y lenguaje coloquial, Lu Xun nos muestra una imagen realista y cruda de la sociedad china, y al mismo tiempo critica las estructuras sociales que permiten la opresión y la discriminación.

Saber más sobre el libro

• El libro fue publicado por capítulos en el Beijing Morning News entre el 4 de diciembre de 1921 y el 12 de febrero de 1922.

• Fue la primera obra escrita completamente en lengua vernácula, que se convirtió en estándar después del Movimiento estudiantil del 4 de mayo de 1919, y al que Lu Xun estuvo asociado. Dicha lengua vernácula surgió como contraposición al chino clásico.

• En la China moderna, tener una "mentalidad Ah Q" (阿Q精神, "Ā Q jīngshén") se usa como burla para describir a alguien que no enfrenta a la realidad y se engaña pensando que es exitoso o tiene una creencia injustificada de superioridad sobre otros.

• Aunque Lu Xun nunca perteneció al Partido Comunista, fue loado intensamente por el Gobierno Chino después de la fundación de la República Popular China en 1949, y Mao Zedong fue un admirador durante toda su vida, llegando a escribir él mismo la inscripción sobre la tumba de Lu Xun.

Para conocer más

Lu Xun murió en Shanghai en 1936 y sus restos están enterrados en el parque al que dieron su nombre, al norte de la ciudad, donde también tiene un museo dedicado a su vida. Fue el primer museo dedicado a una persona desde la fundación de la República Popular China.